SEMANA 21.4

LUNES:

Último repaso a los mazos de Underworlds para la partida de mañana y un ligero avance en el pintado de los Intercesores de 40k.

MARTES:

Hoy quedé con Borja para jugar unas partidas de Underworlds. Como empezamos a las 16:30 nos dio tiempo a jugar 3 partidas antes del toque de queda, que está fijado a las 20:00. Todas ellas se saldaron con derrota para mí. Podría parecer una jornada desastrosa, y lo es desde un punto de vista meramente estadístico, pero ha sido muy productiva a nivel lúdico, pues realmente lo pasé muy bien jugando y creo haber sacado muchas conclusiones positivas sobre esta banda: los Estraperlistas de Thundrik.

La primera partida se me puso muy cuesta arriba desde el principio, ya que en el primer turno del juego Borja se cargó a mi líder, y con él la posibilidad de inspirar al resto de mis guerreros. No es que sea la banda en la que más se note la diferencia entre un guerrero en estado normal e inspirado, pero todo suma. Lo peor es que en esta banda el líder es, de lejos, el mejor. Para colmo de males, en la primera ronda también cayó otro guerrero. Sin embargo en el final de fase logré hacer 6 puntos de victoria con las cartas de objetivos, logrando así equilibrar la partida. En la segunda ronda la cosa seguía bastante igualada, y aunque Borja logró distanciarse un poco, yo seguía teniendo ciertas opciones para ganar. Cierto es que eran opciones bastante remotas, pues necesitaba un par de jugadas afortunadas para ello, pero las espadas estaban en todo lo alto. Sin embargo, al final de la partida sólo me quedaba un guerrero y todos mis planes de puntuación se habían ido al traste, con lo que me quedé atascado en 10 puntos y mi rival llegó a unos 15 ó más. La verdad es que cuando vi que había perdido la partida dejé de prestar atención al resultado. En cualquier caso clara victoria para Borja.

La segunda partida, tras una breve pausa para hacernos un café, empezó muy bien para mi. Parecía que había aprendido un par de cosas útiles en la partida anterior y además mejoró bastante mi suerte con los dados. La primera ronda se saldó con un 5 ó 6 a 1 a mi favor. En la segunda la cosas se me torcieron un poco, sobre todo gracias a un ardid muy bien jugado por parte de Borja que me impidieron anotar 5 puntos que ya tenía, literalmente, hechos. Y es que, en uno de los últimos ciclos de poder, quitó un marcador de objetivo de su territorio, marcador al que tenía pensado mover en mi última activación, lo que me permitía puntuar una carta de objetivo de 3 puntos de victoria por controlar 2 marcadores en territorio enemigo y otra de 2 PV por controlar 3 objetivos. Mi gozo en un pozo... Aunque Borja logró puntuar más que yo, básicamente a base de hechizos, yo seguía teniendo una cierta ventaja. El problema vino en la última ronda, en la que me quedé a un impacto de eliminar al último de sus guerreros. Únicamente con ese punto ya habría vencido, pues al final quedamos 9 a 8 para Borja. Lo peor de todo fue que con una tirada de 4 dados y con "romper" no hice ni un sólo impacto. Como ya había pasado en la primera partida, no logré hacer ni un sólo punto de victoria en la fase final de la tercera ronda. Hay que intentar pulir esos detalles. También fue fruto de la bisoñez el que se me olvidara inspirar a un guerrero. Una gran cagada, pues con ese simple gesto su vida aumentaba en 1, con lo que seguiría vivo al final de la partida. Dicho de otro modo; Borja tendría un punto de victoria menos, con lo que habría ganado yo, pues controlaba más objetivos al finalizar la partida. Otro fallo que debo evitar por todos modos es el de olvidar sistemáticamente emplear la reacción del líder tras su activación que convierte todos los hexágonos a su alrededor en letales para los guerreros enemigos. Esta reacción puede dar mucho chance en partidas contra bandas que no tengan ataque a distancia, así que tengo que acostumbrarme a usarlo.

La tercera partida fue, simplemente, un despropósito por mi parte. La primera ronda fue bastante triste y ambos nos estábamos quedando en los fondos de los tableros sin atacarnos. Finalmente me animé a usar una carga para atacar a sus guerreros y posteriormente un ardid para desplazar un objetivo y ponerlo bajo el guerrero que realizó la carga. Todo marchaba bastante bien en esta primera ronda hasta que Borja usó el mismo ardid de la partida anterior para eliminar uno de los marcadores de objetivo que yo controlaba y, acto seguido, otro para empujar a otro de mis guerreros que controlaba otro objetivo. Total que en un visto y no visto pasé de controlar 3 objetivos, y poder conseguir al final de la fase 5 puntos de victoria, a controlar sólo 1 y no conseguir nada de nada. Pese al revés, no desesperé, ni arrojé la toalla en ese momento. Pero sí lo hice cuando robé cartas en el final de fase y comprobé que no me valían para nada: 4 mejoras y ninguna de objetivo con la que poder hacer un triste punto de victoria. Como podéis imaginar la segunda y la tercera ronda fueron un calvario y ni merece la pena reseñar nada de ellas. Al final Borja hizo un montón de puntos. Yo sólo 1, y gracias...

En resumen buenas partidas; muy entretenidas y aleccionadoras. La última no tanto, pero bueno... Como conclusión decir que los cambios introducidos en los mazos la semana pasada funcionaron bien, incluso mejor de lo que pensaba, pues los usé prácticamente todos y con bastante provecho. He rebuscado un poco más en las cartas que tenía por casa intentando encontrar ardides que permitan empujar a los guerreros para así aumentar la capacidad de controlar los objetivos, que es la principal vía de conseguir puntos de victoria con esta banda. También he encontrado un par de mejoras que permitirían dar un poco más de pegada a los guerreros. Todo puede ser útil, depende de cómo se desarrolle la partida, pero no pienso volverme loco; la verdad es que los mazos están muy bien, aunque es cierto que todo es mejorable. Quizá simplemente con un poco más de experiencia los resultados mejoren.

MIÉRCOLES:

Poniendo al mal tiempo buena cara, aproveché que llovía para avanzar un poco en el pintado de las minis de 40k. El siguiente paso serán los detalles en dorado, para luego pasar a los lavados. Espero acabar esta escuadra de Intercesores, aunque en realidad sólo son 4, el fin de semana.

Antes de cenar jugué una partida de Golpe de fe con mi esposa. Un juego familiar de lo más divertido en el que puedes poder a prueba tu habilidad. Como ex campeón infantil de mi clase de carrera de chapas me impuse con relativa facilidad. Independientemente del resultado, lo destacable es que lo pasamos fenomenal.

Como estoy bastante picado con Underworlds pasé un buen rato revisando los mazos de los estraperlistas. Al final, el mazo de poder tiene 12 cartas de cada tipo y en el de objetivos cambié un par de cartas de auge por otras que parecen más fáciles de puntuar, puesto que no dependen de las tiradas de dados, ni del posicionamiento de los guerreros enemigos. No me acababan de convencer las dos cartas que tenía el mazo de objetivos para puntuar en la última fase final, así que una de ellas la cambié por otra similar, pero más asequible y la otra por una que se puntúa en una fase final cualquiera. Las cartas de objetivo que se puntúan en el último final de fase son muy jugosas, ya que suelen dan muchos puntos de victoria, pero si te salen al principio de la partida te la pueden fastidiar, ya que te condicionan mucho el desarrollo de la misma. Es más, lo normal es que te tengas que deshacer de ellas si quieres tener opciones de victoria. Por eso pienso que cuantas menos tengas en el mazo, mejor. 

JUEVES:

Un paso más en el pintado de los Intercesores de 40k, aunque más corto de lo deseable. No obstante, sigue en pie el objetivo de acabarlos a lo largo del fin de semana.

Después de mucho tiempo retomé Marvel Champions: el juego de cartas. Una feliz ocurrencia, pues pasé un rato de lo más entretenido. Eso sí, jugando unas partidas de prueba en el modo sencillo.

VIERNES:

Inopinadamente quedamos Héctor y yo para jugar un par de partidas de Underworlds. Tenía muchas ganas de ver cómo funcionaban los cambios que había introducido en los distintos mazos. La verdad es que Héctor está un poco tierno, en este juego, para tomar estas partidas como referencia. Aún así puedo decir que creo haber logrado el objetivo principal; aumentar la capacidad de mover los guerreros, especialmente los propios. También parece que ha mejorado sensiblemente la capacidad ofensiva de la banda. Donde no he tenido ocasión de apreciar mejoras es en la resistencia de mis guerreros, pues no se dio el caso de aplicar las mejoras o ardides seleccionados para ello. 

La primera partida tuvo más historia que la segunda, en la que Héctor se colgó del larguero y al no pasar a mi territorio no inspiró a sus guerreros, con lo que fueron poco operativos, de modo que al final sólo le quedaba uno y yo tenía a los míos prácticamente intactos. La primera partida estuvo bastante bien. Conseguí una cierta ventaja desde el principio, gracias a dos cartas de auge, aunque Héctor logró recortar distancias al eliminar a uno de mis guerreros. El problema fue que no pude puntuar las cartas de objetivo que me iban entrando, pues los marcadores de objetivo estaban un poco lejos. Ahí estuvo muy hábil Héctor, pues eligió escoger él primero el tablero, con lo que se garantizó colocar 3 de los 5 marcadores de objetivo y, lógicamente, los puso en su territorio. En cualquier caso iba haciendo poco a poco unos cuantos puntos, de modo que al final me planté con 10, Héctor logró recortar algo la diferencia en el último final de fase en el que consiguió 3 puntos y yo ninguno. Puntuación final: 10 a 8 para el menda. Lo pasamos muy bien y nos echamos unas risas. 

SÁBADO:

Sesión de pintura intensiva para ver si puedo acabar la escuadra de Intercesores de 40k antes de que acabe el fin de semana.

DOMINGO:

Aunque he pintado algo me falta mucho para acabar los Intercesores de 40k. La semana que viene los tengo que acabar fijo.

Hoy he retomado, tras un par de partidas de "pretemporada", el Marvel Champions. La primera partida en el modo experto, aunque con el módulo de enemigos más fácil, se saldó con victoria para la Viuda Negra. Ahora que me ha vuelto a picar el gusanillo, he decidido que jugaré una semana con cada superhéroe y cuando acabe con todos, allá por finales de febrero, jugaré la expansión de Cráneo Rojo.

Sigue cuidándote mucho. Un saludo.