domingo, 28 de noviembre de 2021

SEMANA 21.48

Lo daría todo por acabar con esta pesadilla.

Perros jugando en la nieve; felicidad en estado puro.


LUNES:

Las malas noticias me quitan las ganas de plantearme, siquiera, el jugar o hacer algo a nivel lúdico. Espero que esta pesadilla acabe lo antes posible y, al final, estemos todos bien y podamos realizar nuestros deseos. Sería tan importante para nosotros... Pero de momento, toca aguantar el chaparrón e intentar sobreponerse a todo ésto. Me temo que va a ser una semana muy triste.


MARTES:

Nada a nivel lúdico.


MIÉRCOLES:

Ídem.


JUEVES:

Más de lo mismo.


VIERNES:

Parece que el sol quiere despuntar entre los nubarrones; la esperanza de un mañana mejor es ahora real. Me he animado lo suficiente como para aceptar una partida de Kill Team con Héctor para mañana.

Mientras tanto he estrenado un juego que tenía por casa desde hace un tiempo; Black Sonata. Es un solitario de movimientos ocultos y deducción. Me ha gustado bastante, pero de momento sigo practicando en el modo fácil.

 

SÁBADO:

Esta mañana ha caído una buena nevada en León, así que hemos tenido que suspender la partida de Kill Team que teníamos programada. Espero que mañana las calles estén practicables. Estas 24 horas de tregua me proporcionan el tiempo suficiente para imprimir las cartas de un comando Tau. Usaré una de las opciones del Compendium, no las de la caja nueva.

Tras unas cuantas partidas al Black Sonata ya he quemado el modo fácil; es hora de dar el salto.

La copiosa nevada que ha caído a lo largo de todo el día me ha despertado una antigua pasión que tenía total, e injustamente, abandonada: la fotografía. Tal es así, que cuando saqué la cámara la batería estaba totalmente descargada, y es que ahora va a hacer 2 años que la usé por última vez. Fue en nuestro viaje de novios, en Sicilia. Recuerdo perfectamente que tenía pensado desconectar la batería, pero un día por otro... Espero que no esté estropeada. Mañana saldré de dudas.


DOMINGO:

Finalmente la batería de la cámara cargó y el sol luce, así que ha desaparecido la nieve de las calles y me podré acercar a la asociación a echar una partida de Kill Team. En un rapto de inspiración, me ha parecido más oportuno llevar a las chicas del Adepta Sororitas. Dicho y hecho; por la mañana imprimí las cartas y tarjetas del comando. La razón del cambio es que recordé que Héctor me comentó que iba a venir con un comando "aún más roto que los Custodes". Casi nada al aparato... Como las Sororitas me parecen un poco más resistentes y confiables me decanté por ellas, en detrimento de los Tau y creo que hice muy bien, porque el rubio se presentó con una colección de Tiránidos, en concreto 10 Genestealers, que sólo tienen ataque cuerpo a cuerpo, con lo que los drones perderían buena parte de su utilidad en esta partida.

Desde el principio, ambos teníamos muy claro lo que queríamos: Héctor puso a todos sus bichos en ocultación y yo a todas mis chicas apostadas. En la primera ronda no hubo disparos, pues en ningún momento tuve visión directa a ninguno de sus agentes, si es que a un ser tan primitivo se puede asignar a esa categoría. Héctor consiguió 1 punto, por la acción propia de la misión y yo 2, uno por la misma razón y otro por controlar el objetivo central. En la segunda ronda, mejor dicho, Punto de inflexión, empezaron los ataques. Lo primero que hice fue lanzar una granada de fragmentación contra un pelotón de Genestealers, que impactó en 3 de ellos. No obstante el resultado no fue tan cruento como yo deseaba y, aunque todos llevaron un recuerdo, solamente uno quedó bastante tocado; a 3 de cascar. Como era de esperar, la pobre hermana sufrió una carga en la subsiguiente activación de Héctor y tuvo el dudoso honor de ser la primera baja de la partida. Pero no dejó el campo de batalla sin dejar su recadito sobre el xeno, con lo que quedó más maduro de un plátano olvidado en la bandeja trasera del coche toda una tarde de verano. Era la primera vez que jugaba con algo que no fuera tan robusto como un marine, de cualquier tipo, pero enseguida me di cuenta que era necesario proceder a sacrificar algún agente si quería tener alguna posibilidad de alcanzar la victoria. Así que lancé una de mis hermanas contra una esquina del tapete, sabiendo que de esa forma distraería al menos un bicho. Es lo que tiene no tener agentes con ataque a distancia. La idea era que pudiera atacar, en el siguiente turno a algún despistado antes de sufrir una carga y, muy posiblemente, pasar a mejor vida. No obstante, la acción estaba en la esquina opuesta del tablero, donde tenía una clara superioridad. Debería haber atacado lo más rápido posible con el lanzallamas pesado, pero tenía miedo de perderlo demasiado pronto tras la carga subsiguiente de los xenos. Visto con un poco de perspectiva, debería haberlo hecho tan pronto como fuera posible porque es un arma realmente devastadora, y aunque era más que posible que hubieran sobrevivido varios agentes enemigos, estarían muy tocados, con lo que podría enfrentarse a la carga con ciertas garantías. Otra razón para haber usado ese artefacto cuanto antes, es que podría pillar a más enemigos; a medida que iban pasando los turnos se iban moviendo, con lo que el número de víctimas potenciales se reducía a ojos vista. Al final de la segunda ronda, la partida estaba en todo lo alto, con muchas bajas por ambos bandos, aunque cometí un fallo muy gordo al mover innecesariamente a una hermana tiradora con un bólter tormenta, lo que hizo que sufriera la carga de un enemigo y desapareciera del mapa. Andando y aprendiendo... En el siguiente punto de inflexión cayó la hermana que tenía desterrada en la esquina donde no pasaba nada, hasta entonces. La pobre no llegó a pegar un sólo tiro, pero es que la acción era vertiginosa en otras partes del campo de batalla. Entre lo más destacable señalar que mi líder cayó tratando de defender un objetivo y que me despisté a la hora de controlar objetivos, con lo que Héctor me adelantó en el marcador. No obstante, tenía una ligera ventaja numérica, que en la práctica fue decisiva al carecer el enemigo capacidad de atacar a distancia. El último punto de inflexión fue muy rápido, pues sólo había 2 xenos y 3 hermanas en pie. Pero mis chicas se mostraron más que suficientes para controlar los puntos claves y al final conseguí una clara victoria a los puntos, aproximadamente 12 a 7. 

Creo que la próxima vez volveré a la carga con las Adepta Sororitas, pues me han encantado y creo que aún pueden dar mucho más de sí, pero para ello tengo que echar más partidas hasta empezar a dominarlas.


Sigue cuidándote mucho. Un saludo.

domingo, 21 de noviembre de 2021

SEMANA 21.47

Contra viento y marea; siempre en la lucha.


LUNES:

Esta tarde saqué un poco de tiempo libre para jugar una partida de Underworlds con Chispa, que volvió a repetir banda. Pasamos un buen rato, sobre todo yo, pero está bastante claro que las bandas de temporadas anteriores no son necesariamente demasiado competitivas; poco pudo hacer el bueno de Javi contra mis orkos de Peñaloka. De todas formas me ha servido de entrenamiento de cara al torneo que está organizando Borja para principios de diciembre. Creo que finalmente iré con esta banda, aunque si me entra el canguelo y el cuerpo me pidiera ir a lo seguro, posiblemente cambie de opinión y rescate a los chicos de Celestus, que aunque son aburridos ofrecen más garantías. Ya ves que soy "resultadista"; el Tiki-Taka para los del "Farsa" y, si no queda más remedio, para los chicos de Luis Enrique.


MARTES:

Poco, por no decir nada, que contar a nivel lúdico.


MIÉRCOLES:

Hoy me dio por sacar del fondo del armario uno de los primeros juegos que compré, hará unos 5 años, el Sherlock Holmes, detective asesor, un juego de deducción más que interesante.

Intenté resolver un par de casos, la verdad es que con poco, muy poco, acierto; en el primero apenas conseguí 35 puntos de 140, pero en el segundo el desastre fue mayúsculo: 0 puntos.


JUEVES:

Hoy pasé a por mi nueva caja de Kill Team por el Baúl de Pirus. Pesa bastante más de lo que pensaba y, aunque en un principio no me convencían demasiado, las novicias del Adeptas Sororitas me han parecido aceptables.  El comando de Tau me parece más que interesante, aunque entiendo que debo dominar más el juego antes de meterme con uno con tantos agentes. De todas formas, lo que más me llama la atención es la escenografía, que intentaré montar este fin de semana.


VIERNES:

Primer asalto al montado de la escenografía de la recientemente adquirida caja de Kill Team, la cosa parece que va para largo, porque trae bastante. Intentaré acabarla mañana.


SÁBADO:

Atracón de montaje de escenografía de la nueva caja de Kill Team. Son geniales, la verdad es que estas ruinas han sido el principal motivo de comprar esta expansión, visto el resultado no me arrepiento en absoluto. La única pega es un fallo en las instrucciones de montaje; hay que quitar todos los bordes de los arcos para poder poner el suelo del piso superior, aunque en el esquema de parece que se tienen que dejar en un par de ellos. Bueno, nada que no tenga remedio... Además ahora ocupa menos espacio y las puedo transportar mejor, pero la idea es montar las 4 ó 5 piezas que faltan para completar la ruina principal. 


DOMINGO:

Hoy he tenido poco tiempo para mis juegos, así que únicamente he podido echar un vistazo a las reglas de Conexión Viena, un juego de espionaje y deducción que espero estrenar en breve con mi esposa.


Sigue cuidándote mucho. Un saludo.

domingo, 14 de noviembre de 2021

SEMANA 21.46


LUNES:

Día aciago para las fuerzas del Caos en Kill Team: dos derrotas sin paliativos frente a Héctor. En la primera partida fui víctima de los Necrones. En la segunda los verdugos fueron un combinado de Custodes y Hermanas del Silencio. Estas chicas no hablarán mucho, pero se les entiende todo; dan hostias como panes...

La primera partida empezó con un error clamoroso por mi parte, pues en el primer turno había gastado un Punto de Mando para jugar el ardid táctico que permite convertir un resultado de 5 en crítico y se me olvidó hacerlo efectivo en un ataque de mi lanzamisiles contra un agente que estaba a 5 heridas de cascar. Una pena, porque la defensa fue suficiente para anular mi impacto, pero no lo hubiera sido para hacerlo con el crítico. Fue un momento decisivo, de aquellos en los que no se pueden cometer errores, y la cagué estrepitosamente. Porque, independientemente de que fuera el líder, recortar la ventaja numérica de los Necrones es muy importante. En fin, andando y aprendiendo. Lo peor de todo es que mi lanzamisiles caería en el primer ataque del siguiente punto de inflexión, ya que se había tenido que exponer mucho para poder atacar en el primero. Aunque íbamos a la par en puntos de victoria, la cosa se me había puesto totalmente imposible por la ventaja numérica de la que disfrutaba Héctor, que ahora era de 8 a 5. Contra esta facción se nota todavía más, porque al poder regenerarse al inicio de la ronda, es muy importante lograr acabar con ellos en el acto; no se puede contar con hacerlo en el siguiente punto de inflexión, porque sistemáticamente se recuperan de dos heridas. Además tampoco estuve nada afortunado con los dados de ataque. Pese a todo, logré cepillarme a unos cuantos necrones, pero al inicio del tercer punto de inflexión ya sólo me quedaban 3 agentes, y lo peor de todo, es que dos de ellos estaban en las últimas. Total, que no llegamos a completar la última ronda porque me quedé sólo con un agente; victoria clara para el rubio y sus necrones.

Si la primera empezó con un error garrafal, en la segunda lo cometí antes de empezar. No sé en qué demonios estaría pensando, posiblemente en los errores de la partida anterior, la cosa es que desplegué los agentes sin tener en cuenta en la necesidad de controlar los objetivos. Con lo que uno de los que tenía al alcance se me quedó sin cubrir. Para tratar de remediarlo envié a la desesperada a mi lanzamisiles, el único que andaba por ahí. ¡En qué hora se me ocurriría! Pese a tener cobertura un ataque doble de un bólter custodes lo envió al otro barrio. Así que, de golpe y porrazo, me quedé sin el punto del objetivo y sin uno de mis mejores hombres. A partir de aquí, la partida se convirtió en una misión imposible. Pese a todo lo intenté, un tanto a la desesperada, pero ayudado de unas tiradas de dados decentes, logré hacer frente a la situación. Al final sólo sobrevivió uno de mis agentes, pero conseguí 8 puntos y Héctor 11. La cosa quedó más ajustada de lo que podría pensarse al iniciarse el segundo punto de inflexión. De todas formas, ahora que hago memoria me doy cuenta que he cometido todo tipo de errores en esta partida; también se me olvidó usar el equipo del líder que reduce en uno el atributo de ataques de los enemigos a menos de 3 pulgadas, con lo que posiblemente hubiera sobrevivido al combate con una de las hermanas. Tampoco estuve nada fino a la hora de activar al Portaestandarte... En fin, que cuando las cosas se me tuercen me obceco y no doy pie con bola. Admiro a la gente que se crece frente a la adversidad; esta claro que no soy de esos. Pero como todo en esta vida, ese aspecto se puede mejorar, y por qué no puede ser a través de los juegos. 

De las dos bandas con las que me enfrenté la de los Necromes me pareció la peor, de hecho creo que con un poco de suerte en las tiradas de ataque y jugando un poco más despierto, es decir no olvidándome de los ardides jugados y buscando un poco más las coberturas, podría haber plantado cara con bastante dignidad.

Otra cosa son los Custodes, la combinación de éstos con las Hermanas del Silencio, hacen una masa casi imposible de abatir. Por si fuera poco a las Hermanas se les pude dotar de un equipo que les da 3 heridas adicionales. Así que casi cuentan como un marine, y son 5, además de los dos angelitos Custodes, que tienen más vidas que un gato. Lo dicho, una combinación letal.


MARTES:

Hoy poco que decir a nivel único; somero repaso de las facciones de Kill Team para ver si encuentro algo que me guste más que los Marines Espaciales del Caos. No obstante les voy a dar alguna partida más antes de probar otras facciones, no sea que el fracaso del lunes sea sólo coyuntural y no un defecto estructural. Además, quiero jugarlos con los Cultistas del Caos, a ver si con 11 minis, 3 marines y 8 cultistas, me apaño mejor.


MIÉRCOLES:

Hoy estuve rehaciendo la lista de X-Wing para el torneo de este sábado. Al final me he decantado por introducir unos pequeños cambios en la lista de Scum que usé en el anterior, que me funcionó bastante bien. Si fuera para jugar unas partidas sueltas, posiblemente llevaría la lista de Imperio, que con la última actualización de puntos ha quedado muy apañada, pero prefiero asegurar y meter una nave más, que nunca se sabe... Me apetece mucho jugar este torneo, básicamente porque me reencontraré con Vicente y Jonathan, al primero hace un año que no lo veo, y al segundo casi dos. 


JUEVES:

Nada que destacar a nivel lúdico, salvo que mi esposa me ha comprado una caja metálica de turrón para que pueda guardar las minis imantadas. ¡Qué maja y qué buena es!


VIERNES:

Hoy se ha caído Gmail y todo parece haber vuelto a la Edad de Piedra. Más nos vale irnos acostumbrando, que cualquier día pega esto un pepinazo que nos manda todo el tingado al carajo. Saco este tema a colación porque tenía pensado colgar la lista con la que voy a participar mañana en el torneo de X-Wing y para eso me hacía falta mandarme el pantallazo desde el móvil al PC por correo electrónico. Espero poder hacerlo mañana.


SÁBADO:

Antes de jugar el torneo de X-Wing, dediqué un par de horas a montar las cinco miniaturas que me quedaba para completar la caja de Adeptas Sororitas. Posiblemente sea la nueva facción a estrenar, sobre todo ahora que parece que la entrega de la nueva caja de Kill Team retrasa su llegada, al menos en el Baúl de Pirus.

Grandiosa velada, nunca mejor dicho, de X-Wing en la asociación Leones Blancos. Lo mejor de todo fue el reencuentro con dos viejos amigos: Jonathan y Vicente, que hacía muchísimo que no veía.

Antes de nada, mostrar mi lista:


En la primera partida me enfrenté al gran Viti, que venía con una lista que ya había padecido en anteriores ocasiones, ahora ligeramente retocada, que estaba compuesta por una nave tipo Lancero pilotada por Ketsu, Bossk a los mandos de un Diente de Perro y Lando Carlissian que llevaba a su YT-1300. Todas las naves tenían el Transpondedor de Códigos Falso, lo que lógicamente complica mucho la vida. Desplegamos enfrentados en el margen derecho del tapete, por el exterior de los asteroides iban, de fuera a dentro, mi Kimogila, Nym y Sol Sixxa, por el interior de los asteroides, pero muy pegado a éstos, iba Zuckuss. Viti hizo lo propio desplegando, desde fuera hacia dentro, al Lancero, a Bossk y, en perpendicular a ellos, a Lando, que en su primer movimiento hizo un 2 cerrado para encabezar el ataque, dejando tras de sí al Diente de Perro. En el segundo turno empezó el intercambio de disparos, y el peor parado fue Zuckuss, que se las llevó de todos los colores, entre otras cosas porque el Lancero le asignó, gracias a la habilidad del piloto, una ficha de tracción. Total, que a las primeras de cambio ya no tenía escudos. Todas mis naves, salvo Sol que estaba "fuera de cacho", dispararon sobre Lando, que quedó bastante tocado. Tuve que pensarme bastante las maniobras del cuarto turno, porque al haber girado a Zuckuss hacia el exterior se convertía en un estorbo para el resto de mis naves. Así que opté por hacer un 2 koi seguido de un tonel, para evitar así el ataque a bocajarro de Bossk, que previsiblemente se quedaría en el sitio con un 0. Estaba en lo cierto con el movimiento del Diente de Perro, pero me equivoqué en mis mediciones y no podía hacer el tonel, así que se quedó vendido y en tierra de nadie. Pero antes de eso, vino mi gran acierto de la partida, que fue el lanzamiento de unas Bombas de Protones, que impactaron tanto en Lando como en el Lancero, ambos ya sin escudos, en el caso de este último gracias a la habilidad de Torani Kulda, que estaba enfrentado a él. Mientras tanto, mis naves se iban trabajando a Lando, que caería en este turno, pues sólo le faltaban dos impactos, y a Bossk. Sorprendentemente Zuckuss sobrevivió este turno, eso sí a falta de un impacto, pues el Diente de Perro no le hizo demasiada mella. 
La verdad es que Viti tuvo muy mala suerte con los dados de ataque en toda la partida. En el siguiente turno caería Zuckuss y empezaría a ponerse la cosa seria para mis bombarderos, en cambio el Kimogila llegaría bastante bien hasta el final de la partida. El primero en entrar en zona roja fue Sol Sixxa, pero no sin antes meterle una Red Conner a Bossk, que lo dejaría incapacitado en el siguiente turno. A partir de aquí ya sólo pudo hacer ataques con la torreta dorsal a través de un asteroide a Bossk. En el turno siguiente el muy dañado sería Nym, que ya había conseguido otro impacto con las Bombas de Protones sobre el Lancero, aún así aguantó hasta el final de la partida. Lo malo fue que el Kimogila, tras hacer un 4 koi se quedó sin poder disparar, por encontrarse en paralelo, pero adelantado a Bossk, que le arreó con todo lo gordo. Al final la cosa no pudo estar más igualada: victoria para mi 130 a 126.

En la segunda partida me enfrenté al temible Jorge, que venía de trabajar y debía tener los dados agotados de tanto esfuerzo, porque apenas se le vieron tiradas con todo impactos, todo esquivas, o cosas así... En esta ocasión vino con una lista de Resistencia compuesta por un YT-1300 con Rey, un Transporte con Cova y a Ello Asty pilotando un T-70. Todas sus naves tenían iniciativas relativamente altas, lo que me dificultó un poco las cosas. En el despliegue dividí mis fuerzas en dos bloques: en el centro iban Zuckuss y Sol Sixxa, mientras que en el sector Ciudadanos, el centro-derecha, desplegué a Nym y, más por el exterior, al Kimogila. Jorge puso todo frente a Zuckuss y Sol, un poco desplazado hacia mi izquierda al T-70. El primer turno fue de aproximación, lo que aproveché para ir acercando a mis naves desplazadas a la derecha, mientras que las del centro iban despacio para retrasar el ataque hasta le llegada de mis refuerzos. En el segundo turno empezaron las "hostialidades" y gracias al ataque combinado de todas ellas dejé a Rey para el arrastre. Lo malo es que dejó sin escudos a Zuckuss, que caería en el turno siguiente, junto con Rey. La verdad es que no jugué bien mis bazas con el Caza Estelar, porque tenía el título Cazador de la Niebla, lo que me había permitido, usando los Ciberimplantes, quedarme en el sitio con un 0 y hacer un tonel, para bloquear o atacar sin ser atacado a Rey, que sabía iba a hacer un 3 signor. Andando y aprendiendo; se nota que era la primera vez que llevaba el título y no caí en la posibilidad de usarlo entonces. Yo tenía bien enfiladas las naves para proseguir mi ataque; el Kimogila había hecho un 1 abierto hacia mi zona de despliegue para atacar al T-70, cosa que hizo, aunque fue lo comido por lo servido, pese a que tenía blanco fijado sobre Ello. Mis dados tampoco iban mucho mejor contra el Transporte; apenas pude hacerle un impacto con 2 ataques y teniendo blanco fijado. En cambio éste me dejó temblando a Sol Sixxa. Cosas que pasan... En el siguiente turno me resarcí con una Red Conner, que lo dejó vendido a mis ataques y a la explosión de una Bomba de Protones. Al final, entre Nym y el Kimogila lo mandé al otro barrio. Ya sólo quedaba una nave enemiga y yo tenía muy mal a mis bombarderos, por suerte no faltó a la cita el crítico de la Bomba de Protones, aunque también se llevó por delante un escudo de mi Kimogila. En nuestro último turno cayó Sol Sixxa, pero mis dos naves restantes hicieron dos buenos ataques y se cepillaron al último piloto de Jorge. Resultado final: 200 a 126 a mi favor.

La tercera partida fue, en la mesa 1, contra el genial Vicente, que vino desde Gijón para llevarse el torneo. Estrenaba para la ocasión una lista de Primera Orden de lo más puñetera, pues los Bomberderos TIE, gracias a su habilidad de hacer un impulso en la Fase de Sistemas, son muy desconcertantes. Si a eso se le añade la posibilidad de arrojar bombas, en este caso Minas de Proximidad, pues apaga y vámonos. Además de estos dos bombarderos llevaba a Centella y a un as llamado Mayor Vonreg. Por separado son bastante peligrosos, pero juntos son temibles. Tras un par de turnos de tanteo y aproximación, en los que el Kimogila se quedó sin escudos y con un daño; a Vicente sí le funcionaban los dados, me la lio muy gorda con los bombarderos, que con su impulso seguido de un 4 recto me dejaron con un palmo de narices a Sol Sixxa y a Zuckuss, que habían desplegado frente a ellos en la parte izquierda del tapete. Por lo menos pude atacar con Nym, aunque estaba en el centro de la diana de todas las naves enemigas, salvo de una, y se quedó tiritando. El Kimogila había hecho una maniobra evasiva para tratar de sobrevivir, y no me fue mal, porque logré que impactara Centella con él, tal y como tenía previsto, con lo que no pudo hacer acción, al igual que Vonreg, que a su vez chocó con él. En el tercer turno otro impulso de los bombarderos, con la consiguiente descarga de minas que casi se lleva por delante a Nym, pues me hizo 3 impactos con una de ellas, para según qué cosas sí me funcionaron los dados..., cayendo en el subsiguiente ataque de Vonreg. Nada, muy mal. Además mis ataques apenas hacían mella en las naves de Vicente, pese a tener blancos fijados. También se le ponían mal las cosas al Kimogila, que caería en el turno siguiente sin apenas haber disparado nada en toda la partida. De lo malo malo, mis dos naves supervivientes estaban intactas y se lanzaron a por uno de los bombarderos, que estaba algo tocado. Tras un par de ataques quedó a un impacto de cascar y con Zuckuss no conseguí derribarlo, pese a tener blanco fijado. Tiré 4 dados, repetí 2 y sólo saqué 2 impactos en total; justo las esquivas que consiguió Vicente. Así es muy difícil... Para más inri ese mismo bombardero, de iniciativa 2, me hizo un par de impactos a Zuckuss en ese mismo turno. Ataques que serían claves para que fuera eliminado sin poder atacar en el turno siguiente, cuando por fin cayó el bombardero. La verdad es que no hubo nada que hacer, entre el desconcierto que supuso la irrupción de los nuevos bombarderos y el gafe con los dados, supongo que era lo justo para compensar la suerte de la primera partida, me quedé con sólo 46 puntos, mientras que él me derribó a 175. No me queda más que felicitar a Vicente, con el que da gusto jugar, porque te alegra el día; es un tío de lo más gracioso y divertido. Vuelve pronto.

Lo dicho, gran torneo nocturno, casi como en los viejos tiempos, de X-Wing, gracias al esfuerzo de Chispa, que es el que lo organiza todo.


DOMINGO:

Hoy nada que reseñar a nivel lúdico; día de descanso tras la paliza de ayer.


Sigue cuidándote mucho. Un saludo.

domingo, 7 de noviembre de 2021

SEMANA 21.45


LUNES:

¿Qué mejor manera de celebrar el Día de Todos los Santos, que enviando a unos cuantos agentes de Kill Team a criar malvas? Para Héctor y para mi fue una gran mañana en la que conseguimos una victoria cada uno.

En la primera partida mis Marines Espaciales del Caos se enfrentaron a un comando de la Guardia de la Muerte, en esta ocasión formado por 3 Marines de la Plaga y un nutrido séquito de los anteriormente conocidos como Poxwalkers, y que ahora se llaman Plagabundos. Entre unos y otros me dejaron el comando reducido a la mínima expresión; al inicio de la cuarta ronda sólo me quedaba un marine. Y digo bien, inicio de la cuarta ronda, porque no la llegamos a completar al alcanzar ambos los máximos puntos posibles: 5 a 9 para el rubio. La partida empezó bastante bien para mi, aunque todo es mejorable, gracias al estreno del lanzamisiles, que tuvo un papel estelar en ambas partidas. En este caso, durante la primera ronda atacó a un grupito de 3 plagabundos cepillándose a uno de ellos y dejando a los otros 2 heridos, con lo que no pudieron alcanzar y controlar un objetivo. Yo me centré en hacerme con el central, pero Héctor mandó allí a un montón de agentes con lo que me chafó el plan. Al final de la primera ronda íbamos empatados a un Punto de Victoria. En la siguiente tuve que exponer mucho a uno de mis agentes para conseguir otro Punto de Victoria y, aunque los ataques de mis marines eran bastante buenos, la habilidad Asquerosamente Resistentes hacía que todo quedara en agua de borrajas, o al menos que necesitara el doble de ataques para conseguir cargarme a los purulentos enemigos. Al final no pude contener la marea infectiva y me vi por detrás en el marcador, si bien es cierto que lo peor estaba en las dos bajas que el "plasmero" de Héctor me había hecho. Yo, hasta el momento sólo me había cargado Plagabundos, con lo que el potencial de la Guardia de la Muerte estaba casi intacto. En el tercer turno estuve a punto de dar un golpe de efecto gracias a una activación muy afortunada de mi líder, que tras una carga se llevó por delante a un Plagabundo y luego hizo lo propio con el tirador de Héctor. Sin embargo cayó bajo los impactos de la pistola de plasma del líder enemigo. Una pena, pues ya sólo me quedaba un agente, que logró cargarse a otro Plagabundo. No obstante, su esfuerzo fue baldío y los 3 agentes supervivientes de Héctor eran más que suficientes para agrandar la brecha en el marcador.  Me ha gustado mucho el comando combinado de Marines de la Plaga y Plagabundos, en un principio pensé que perderían en relación a uno de sólo marines, pero ya se ve que no. Al menos en escenarios en los que hay que controlar objetivos y realizar acciones sobre ellos. De esta partida he sacado varias lecciones, la más importante es la necesidad de desplegar con más cuidado a los agentes, intentando alcanzar en la primera activación los objeticos de la partida y, si es posible, con más de un agente a la vez. Además que frente a bandas más numerosas es mejor asignar la orden de Trabado a más agentes para que puedan efectuar disparo defensivo desde el primer turno.

En la segunda partida Héctor tuvo a bien cambiar de comando y jugó con los Caballeros Grises, de tan infausto recuerdo para mi. Sin embargo eran otros tiempos y otros comandos, parece claro que los Marines Espaciales del Caos son superiores, especialmente si, como fue el caso, los lanzan al ataque sin más contemplaciones. La partida empezó mal para mi, pues en el primer ataque ya se cargaron a uno de mis marines, y en el segundo dejaron a mi líder a falta de 3 impactos para causar baja. Sin embargo, y todavía en el primer turno, el ataque combinado de mi "plasmero" y del lanzamisiles hicieron estragos en las líneas enemigas. Primero ataqué con el rifle de plasma, dejando a un pobre caballero a falta de 3 heridas para cascar, cosa que haría con el ataque del lanzamisiles. Como estaba tan a punto de caramelo y tenía a otro caballero cercano al blanco me arriesgué y usé el perfil de fragmentación. Del primer ataque conseguí eliminar al blanco, cosa que entra dentro de lo normal porque estaba a huevo, pero lo sorprendente es que con el ataque de área me llevara por delante a su compañero. Buena tirada de ataque y horripilante tirada de defensa de Héctor; dos por el precio de uno. ¡Así da gusto! En el segundo Punto de Inflexión el lanzamisiles atacó llevándose por delante a otro caballero que estaba algo tocado, en esta ocasión utilicé el perfil perforante. Lo malo es que quedó expuesto a los disparos y sufrió varias heridas, que se vieron incrementadas con la carga de otro gris, al menos pudo hacerle una herida durante el combate, que posteriormente sería clave, antes de irse a celebrar Halloween. Efectivamente, el caballero quedó vendido frente al ataque de mi plasma una vez eliminó a mi agente. Así que lo ataqué con él sobrecalentado, pero sólo pude conseguir tres impactos, uno de los cuales esquivó Héctor, si no llega a ser por las heridas que ya tenía se hubiera salvado. El resto de mis agentes se centraron en avanzar a cubierto hacia el centro, tratando de evitar los disparos de los pocos grises que quedaban. En el tercer punto de inflexión tuve la suerte de conseguir la iniciativa, así que con un plasmazo de mi líder me cargué a otro de sus agentes, con lo que Héctor ya sólo contaba con uno, que cayó a continuación. Entre tanto iba recortando la diferencia que me sacaba Héctor en Puntos de Victoria, hay que recordar que este es el objetivo principal del juego. Así dimos por concluida la batalla, ya que con las activaciones que me quedaban estaba claro que me iba a hinchar a conseguir puntos. Buena partida, aunque posiblemente las cosas se me hubieran puesto más difíciles si Héctor hubiera activado con más cuidado a sus agentes.


MARTES:

Sigo con la pintura de los Marines Espaciales del Caos de Kill Team, aunque les queda bastante, la cosa promete.


MIÉRCOLES:

Estuve los ratos libres que tuve por la tarde pintando a los agentes del comando de Marines Espaciales del Caos de Kill Team. He llegado al punto en el que la precisión prima, con lo que la velocidad se resiente mucho; si logro terminar a 3 de éstos para la próxima semana me doy con un canto en los dientes.


JUEVES:

Gran quedada para jugar a Underworlds, parece que los esfuerzos de Borja por relanzar el juego están dando sus frutos, pues hoy éramos 5. La propuesta era jugar unas cuantas partidas al formato Rivals, para ir calentando motores de cara al torneo que está organizando el susodicho de cara a las Navidades. Pude jugar dos partidas, la primera contra Erik, que está empezando, y la segunda contra Jairo, todo un veterano, pese a que sólo he jugado con él un par de veces. 

Erik también venía con otra banda de orkos, y aunque sólo son 3, seguramente es una de las bandas más pegonas que hay. Pese a estar empezando conoce las reglas bastante bien y salvo un par de correcciones, y alguna sugerencia amistosa que le hice, el juego fluyó con bastante facilidad. En el primer turno me pasé de precavido, pero es que la pegada de esos orkos malotes es brutal. De todas formas, visto el escaso éxito que tuve con las tiradas, creo que hice bien en no arriesgarme; en defensa negado, en ataque totalmente nefasto. Pese a todas las precauciones los guerreros de Erik se llevaron por delante a uno de los míos en el primer turno y a otro en el segundo. Afortunadamente Erik no conseguía demasiados puntos de victoria, aunque yo lo hacía aún peor; al final del segundo turno el marcador reflejaba un patético 4 a 2 a favor de mi rival. Sin embargo en el último turno me centré en puntuar las cartas de objetivos y alcancé los 7 puntos, mientras que Erik se quedó atascado en 6. El marcador no fue demasiado justo con los méritos de uno y otro. Debería haber ganado Erik, de hecho no lo hizo porque, pagando la novatada, en el último turno no presionó a mi líder, que estaba sobre un objetivo, lo que me permitió puntuar 2 cartas de objetivo en el final de fase y conseguir así 5 puntos. Seguro que no se le olvida la lección; la próxima vez lo hará mejor.

La segunda partida me enfrentó a Jairo y a sus Despojos de Gusano, una banda que he jugado un par de veces pero que no me llegó a convencer y, vista la partida de hoy, creo que la valoración que hice en su día fue la correcta; son difíciles de manejar, más delicados de lo que parecen, pegan poco... vamos: una joya. Eso sí; son unas miniaturas preciosas. Si en el primer turno de la anterior partida había sido muy conservador, en este no iba a ser menos. Lo gracioso  es que Jairo también lo fue; el resultado fue una primera ronda patética. Sólo hubo un par de ataques, precisamente en la última activación de cada jugador. En esta partida la mano no me falló y gracias a unas tiradas más que decentes logré deshacerme de un par de seres purulentos en la segunda ronda, mientras que en la última me cepillé al guerrero que le quedaba a Jairo. Una paliza en toda regla, porque incluso tuve suerte a la hora de descartarme de objetivos en el primer final de ronda; a partir de entonces pude puntuar todas las cartas que me entraron. Espero que la racha siga así cuando celebremos el primer torneo Rivals de la asociación, lo que será en breve. 


VIERNES:

Hoy nada de nada a nivel lúdico, salvo que continúa el pintado de miniaturas para Kill Team.


SÁBADO:

Más horas con las minis de Kill Team, la tarea es ardua, pero espero que mañana pueda acabar con los primeros 4 agentes. 


DOMINGO:

¡Chin-pun! Acabé con los 4 primeros Marines Espaciales del Caos, ya sólo me quedan 6 para completar el comando de Kill Team... Estoy bastante satisfecho con el resultado, os dejo una foto para que juzguéis vosotros mismos. 


Es verdad que llevaba mucho tiempo sin pintar, y por lo tanto no estoy demasiado práctico, pero aún así me sigue maravillando la gente que en mucho menos tiempo que yo obtiene resultados por lo menos tan buenos como los míos. Será cuestión de perfeccionar la técnica y de hacerme con unos buenos pinceles; los que estoy usando creo que han llegado al final de su vida útil, el más fino está un poco espelurciado y lo que voy haciendo lo estropeo con las patas de atrás... Aún así, no me veo capaz de acortar demasiado los tiempos. Tampoco quiero que ésto suene a queja, al fin y al cabo es un pasatiempo, y como tal hay que tomarlo. Pero un poco de presteza nunca está de más.


Sigue cuidándote mucho. Un saludo.

SEMANA 22.25 El verdadero éxito sólo se logra tras superar el fracaso. Lástima que ninguna de las muchas decepciones que he acumulado me hay...