SEMANA 21.8

¿Por qué ser contumaz? ¿Tan ciego te hacen estar? 

LUNES:

El día puede resumirse así: pintar, pintar y pintar. Ya queda menos para acabar la banda de los Machacantez de Morgok. Espero que mañana pueda poner el ramo...

MARTES:

¡Por fin!: Acabé las tres minis de la banda de Morgok.

Me ha costado sangre, sudor y lágrimas. Vale, lo admito, no he sangrado, no he sudado y tampoco he llorado. Pero casi: me clavé el cuchillo de Morgok en un dedo, no sangré pero me hice un daño del copón, no he sudado pero porque es invierno, aún así me han dado varios sofocos al ver lo lento que iba pintando y además me ha dado una tendinitis horrible en el hombro derecho, yo creo que debido a la tensión propia del pintado. 

La verdad es que no sé cómo lo hacen los demás, pero tengo la impresión de que van mucho más rápido que yo y sus resultados mejores que los míos. Debe ser una cuestión de talento, como debo tener poco lo compenso poniendo mucha ilusión, que eso lo suple casi todo. Por ello estoy bastante satisfecho de los resultados, así como del esfuerzo realizado. Os dejo una foto para que juzguéis vosotros mismos:

Los Machacantez de Morgok al completo buscando alguien a quien felicitar el día.

MIÉRCOLES:

Hoy toca descanso de tanto hobby, así que me limité a un poco de Marvel Champions. En este caso perdí contra Klaw y el grupo de encuentro Civiles en Peligro. La cosa estuvo bastante ajustada, perdí la primera, gané la segunda y en la de desempate no tuve opción ninguna. Mañana será otro día...

JUEVES:

Iron Man se cobró la revancha del día anterior y ganó 2-0 a Klaw. No creo que este superhéroe sea el mejor, desde un punto de vista lúdico, de los que tengo en Marvel Champions; cuando logras poner 4 ó 5 mejoras de tecnología ya tienes la partida hecha, es verdad que antes está la cosa más emocionante, pero no resulta especialmente divertido. Mañana, si es que tengo tiempo porque he quedado con Borja para nuestro duelo en la campaña de Underworlds, jugaré contra el siguiente grupo de encuentros por dificultad: Señores del Mal.

Ya tengo elegida la banda de Underworlds con la que me voy a enfrentar mañana a Borja, se trata de los orkos de la primera temporada. No tengo una razón clara para cambiar de banda en medio de la campaña, es más bien una cuestión de instinto, y es que creo que las bandas que domino no son las más adecuadas para jugar contra Borja, porque tiene el mazo muy pulido y un gran dominio del juego. En concreto, los Estraperlistas me parecen demasiado blandos, tienen poco aguante y hacen muy poco daño. La banda de Lady Harrow tiene un modo de juego demasiado expuesto para lo poco que pegan. En vista de la necesidad de cambiar de banda, he optado por ésta porque, sobre el papel, es bastante equilibrada en relación a las tres variables, para mi, más importantes del juego: su número, son 4 miniaturas, su capacidad de pegada, con un par de ataques certeros hacen 2 ó 3 de daño sin estar inspirados y su resistencia, tienen 4 heridas y defienden a escudos. Eso la hace apta tanto para jugar a la conquista de objetivos como al ataque, sin destacar en ninguna de las dos opciones, pero sí mostrando una gran polivalencia y equilibrio. En principio, la idea es jugar a la defensiva intentando dominar los objetivos, obligando a que Borja ataque, si es así me lanzaré a por toda mini que ose ponerse a tiro. En caso de que el rival también busque puntuar por objetivos siempre tendré opción de lanzarme al ataque. Estas variantes de juego se manifiestan a la hora de confeccionar los mazos; he metido bastantes ardides con los que fastidiar de una manera u otra a las miniaturas que están adyacentes a las mías y otros que sirven para dominar objetivos, mientras que las mejoras están pensadas para reforzar la resistencia y el poder atacante de la banda. Quizá lo más interesante es que en el mazo de objetivos tengo más cartas enfocadas al control de objetivos que de cualquier otra cosa. De modo que potencialmente pueden dar más Puntos de Gloria que las de ataque, en concreto se podrían conseguir 11 y 8 respectivamente. 

Mañana veremos cómo nos sale la jugada, ya se sabe que sobre el papel todas las estrategias son geniales... En cualquier caso, las tácticas enfocadas en el control de objetivos me parecen mejores, o al menos se ajustan más a mi modo de juego, ya que no giran en torno a los ataques, es decir al azar de las tiradas de dados, y además son menos arriesgadas. El principal inconveniente es que para garantizar el éxito debes contar con más miniaturas que tu rival, por lo que debes usar una banda de no menos de 4 miniaturas. Lo bueno de los orkos es que si el oponente tiene una banda con más guerreros en un pis-plás le quitas un par de ellos a poca suerte que tengas con los ataques.

VIERNES:

A las 5 nos personamos Borja y un servidor para jugar unas partidas a Underworlds en el marco de la campaña de escalera que hemos organizado en la asociación. Borja jugó con Rompemaldiciones, mientras que yo iba con la banda de Ironskull.

Éstos son los mazos con los que jugué:

Mazo de objetivos

Mazo de mejoras.

Mazo de ardides.

En la primera partida Borja ganó todas las tiradas iniciales y me cedió la iniciativa en todas las ocasiones. Cuando vi que me dejaba poner los objetivos en primer lugar, y por lo tanto poner 3 y él solamente 2, comprendí que había picado el anzuelo; creyó que iba al combate directo y no por objetivos, como era mi idea principal. En mi primera activación puse en guardia a mi líder, para en la segunda realizar una carga, puntuando así un auge: Cambio de Táctica. En la misma ronda pude puntuar otro auge, para lo cual únicamente tuve que atravesar un hexágono letal, usando Riesgo Calculado. La cosa pintaba bien, tenía 2 puntos de victoria antes de llegar a la fase final, en la que Borja hizo sólo un punto, yo otro más. El problema vino en la siguiente ronda, en la que en un abrir y cerrar de ojos se cargó a Ironskull y a otro de sus chicoz. Mi gozo en un pozo, además no tenía buena mano de objetivos, ni de poder. Antes de iniciarse la última ronda ya tenía claramente la partida perdida. Al final Borja hizo 15 puntos y yo sólo 4. La partida la perdí por no tener un conocimiento suficiente de la banda, por forzar la inspiración de los guerreros a consta de pasar por hexágonos letales, con lo que luego cayeron con un único ataque de 3 de daño y por cambiar de planes sobre la marcha sin tener necesidad de hacerlo, aunque en mi defensa puedo decir que las cartas de objetivos que robé no eran las mejores. Ciertamente me lancé demasiado alegremente a la carga, dejando a los guerreros aislados y a merced de los ataques de Borja. Una pena, la cosa había empezado tan bien...

Al empezar la segunda partida, Borja seguía sin darse cuenta de que mi plan realmente era el de control de objetivos, lo cual demuestra que en la primera partida no hice, quizá sea mejor decir que no pude hacer, nada de lo que tenía pensado cuando monté los mazos de la banda. Así que me volvió a dejar elegir el tablero primero y, como en la anterior ocasión, Borja los dispuso longitudinalmente, pero esta vez, pensando en no sé muy bien qué, colocó uno de los objetivos en mi tablero, con lo que al final tenía 4 en mi territorio y él sólo 1 en el suyo. Craso error. Además pensando en que me lanzaría directamente a la carga, colocó todos sus guerreros bastante atrás, especialmente al líder, con lo que no pudieron atacarme en el primer turno. Para qué quería más... Se limité a ocupar objetivos, con lo que en la fase final de la primera ronda puntué 2 cartas y me hice con 5 puntos de victoria. Borja sólo pudo conseguir uno. En la siguiente ronda no pude hacer casi nada, pues las cartas de objetivo no me fueron muy propicias y además con un poster ardid me quitó la posibilidad de conseguir un par de puntos de victoria más. En la última ronda la cosa se animó bastante y Borja claramente iba recortando la distancia. Al final acabamos 14 a 11, gracias a que en mi última activación de la última ronda, jugué un ardid que me permitió empujar a una de las minis a un objetivo y así hacer 3 puntos más. En cualquier caso habría ganado porque controlaba más objetivos que él. 

Tras una breve pausa para relajarnos y despejar un poco el coco, retomamos el juego. Ahora Borja había descubierto mi plan, así que me vi obligado a cambiar de táctica. Además en esta ocasión se decidió a escoger primero el tablero. En vista de lo dicho anteriormente opté por colocarlos apaisados, con lo que tenía más opciones de alcanzar los objetivos que él pusiera en su terreno, optando por una táctica mixta basada en una espera cautelosa y el avance paciente hacia los objetivos. De esta manera, me pasé buena parte de la primera ronda robando cartas de poder, en la última activación hice una carga con Ironskull contra la única miniatura que se me puso a tiro, y aunque fallé, como en la primera activación lo había puesto en guardia pude ganarme otro punto de victoria con la correspondiente carta de objetivo. El punto lo gasté en colocar la mejora Arma Oculta, lo que permitía a mi líder hacer 2 puntos de daño adicionales en caso de obtener un golpe crítico. Mano de santo; en la siguiente ronda gané la iniciativa y le metí un leñazo de 5 heridas a la desgraciada miniatura que se había quedado a su lado al final de la ronda anterior. En la siguiente activación Borja movió peligrosamente a su líder, dejándolo al alcance del mío, así que cargué, sacando otro golpe crítico... y otra baja. Baja, que se completó con la puntuación de otra carta de objetivo de auge, Duelo Victorioso, porque mi líder mató al líder enemigo; 2 puntos más. La partida estaba totalmente decidida, el resto de la ronda me dediqué a ocupar los objetivos y a responder a un ataque a la desesperada de Borja, que antes de iniciar la tercera ronda concedió.

Buenas partidas, en las que me acompañó bastante la suerte, especialmente en la última con esos dos golpes críticos seguidos de Ironskull. Ahora sólo falta que la gente se anime y la campaña coja una velocidad de crucero razonable. La próxima semana he quedado para jugar con Héctor, y parece que empiezan a concretarse más duelos. A ver si es verdad, que el juego realmente merece la pena.

  

SÁBADO:

Estoy un poco saturado de tanto juego, así que mi actividad lúdica se limitó a repasar la banda de Ironskull, que sorprendentemente estaba sin pegar y a imprimarla. En cuanto me anime pinto esta banda de Underworlds, pero creo que las armaduras irán en amarillo, para diferenciarla más de los Machacantez de Morgok.

Por la tarde jugué mi tradicional partida al mejor de 3 en Marvel Champions, en esta sesión tocaba que Iron Man se enfrentara a los Señores del Mal. La primera partida se saldó con derrota aplastante de Klaw, apenas pude superar la primera fase. En la segunda partida vencí, pero bastante ajustado, mientras que la tercera fue épica: vencí literalmente sobre la bocina. Si llega a durar un turno más Klaw habría completado su plan y sólo me sobró un punto de daño para derrotarlo. Si no hubiera tenido suerte con la última mano habría perdido. Mañana toca enfrentarse a las Legiones de Hydra.

DOMINGO:

Esta mañana me he puesto a pintar la banda de Ironskull y la cosa va realmente deprisa. Esa es la ventaja de que las miniaturas tengan pocos detalles y, por qué no decirlo, de no tener demasiadas ganas de complicarme la vida pintando. En esta ocasión he optado por el color "oficial"; el amarillo-mostaza y la verdad es que está quedando mejor de lo que pensaba. No creo que me de tiempo para acabarlo antes del jueves o viernes, que en principio es cuando quedaré con Héctor para jugar nuestra partida para la campaña de Underworlds, pero lo intentaré. Y es que hay una gran diferencia estética entre una banda pintada y sin pintar, y aunque parezca mentira, hace que la experiencia de juego sea bastante mejor.

Jornada trágica en Marvel Champions con doble derrota para Iron Man contra el grupo de encuentro de las Legiones de Hydra. Desastre total, y con pocos visos de obtener mejores resultados en la revancha que jugaré mañana; de todos los grupos de encuentro, éste es el que peor se adapta a las características de Iron Man.

Sigue cuidándote mucho. Un saludo.