SEMANA 21.45
LUNES:
¿Qué mejor manera de celebrar el Día de Todos los Santos, que enviando a unos cuantos agentes de Kill Team a criar malvas? Para Héctor y para mi fue una gran mañana en la que conseguimos una victoria cada uno.
En la primera partida mis Marines Espaciales del Caos se enfrentaron a un comando de la Guardia de la Muerte, en esta ocasión formado por 3 Marines de la Plaga y un nutrido séquito de los anteriormente conocidos como Poxwalkers, y que ahora se llaman Plagabundos. Entre unos y otros me dejaron el comando reducido a la mínima expresión; al inicio de la cuarta ronda sólo me quedaba un marine. Y digo bien, inicio de la cuarta ronda, porque no la llegamos a completar al alcanzar ambos los máximos puntos posibles: 5 a 9 para el rubio. La partida empezó bastante bien para mi, aunque todo es mejorable, gracias al estreno del lanzamisiles, que tuvo un papel estelar en ambas partidas. En este caso, durante la primera ronda atacó a un grupito de 3 plagabundos cepillándose a uno de ellos y dejando a los otros 2 heridos, con lo que no pudieron alcanzar y controlar un objetivo. Yo me centré en hacerme con el central, pero Héctor mandó allí a un montón de agentes con lo que me chafó el plan. Al final de la primera ronda íbamos empatados a un Punto de Victoria. En la siguiente tuve que exponer mucho a uno de mis agentes para conseguir otro Punto de Victoria y, aunque los ataques de mis marines eran bastante buenos, la habilidad Asquerosamente Resistentes hacía que todo quedara en agua de borrajas, o al menos que necesitara el doble de ataques para conseguir cargarme a los purulentos enemigos. Al final no pude contener la marea infectiva y me vi por detrás en el marcador, si bien es cierto que lo peor estaba en las dos bajas que el "plasmero" de Héctor me había hecho. Yo, hasta el momento sólo me había cargado Plagabundos, con lo que el potencial de la Guardia de la Muerte estaba casi intacto. En el tercer turno estuve a punto de dar un golpe de efecto gracias a una activación muy afortunada de mi líder, que tras una carga se llevó por delante a un Plagabundo y luego hizo lo propio con el tirador de Héctor. Sin embargo cayó bajo los impactos de la pistola de plasma del líder enemigo. Una pena, pues ya sólo me quedaba un agente, que logró cargarse a otro Plagabundo. No obstante, su esfuerzo fue baldío y los 3 agentes supervivientes de Héctor eran más que suficientes para agrandar la brecha en el marcador. Me ha gustado mucho el comando combinado de Marines de la Plaga y Plagabundos, en un principio pensé que perderían en relación a uno de sólo marines, pero ya se ve que no. Al menos en escenarios en los que hay que controlar objetivos y realizar acciones sobre ellos. De esta partida he sacado varias lecciones, la más importante es la necesidad de desplegar con más cuidado a los agentes, intentando alcanzar en la primera activación los objeticos de la partida y, si es posible, con más de un agente a la vez. Además que frente a bandas más numerosas es mejor asignar la orden de Trabado a más agentes para que puedan efectuar disparo defensivo desde el primer turno.
En la segunda partida Héctor tuvo a bien cambiar de comando y jugó con los Caballeros Grises, de tan infausto recuerdo para mi. Sin embargo eran otros tiempos y otros comandos, parece claro que los Marines Espaciales del Caos son superiores, especialmente si, como fue el caso, los lanzan al ataque sin más contemplaciones. La partida empezó mal para mi, pues en el primer ataque ya se cargaron a uno de mis marines, y en el segundo dejaron a mi líder a falta de 3 impactos para causar baja. Sin embargo, y todavía en el primer turno, el ataque combinado de mi "plasmero" y del lanzamisiles hicieron estragos en las líneas enemigas. Primero ataqué con el rifle de plasma, dejando a un pobre caballero a falta de 3 heridas para cascar, cosa que haría con el ataque del lanzamisiles. Como estaba tan a punto de caramelo y tenía a otro caballero cercano al blanco me arriesgué y usé el perfil de fragmentación. Del primer ataque conseguí eliminar al blanco, cosa que entra dentro de lo normal porque estaba a huevo, pero lo sorprendente es que con el ataque de área me llevara por delante a su compañero. Buena tirada de ataque y horripilante tirada de defensa de Héctor; dos por el precio de uno. ¡Así da gusto! En el segundo Punto de Inflexión el lanzamisiles atacó llevándose por delante a otro caballero que estaba algo tocado, en esta ocasión utilicé el perfil perforante. Lo malo es que quedó expuesto a los disparos y sufrió varias heridas, que se vieron incrementadas con la carga de otro gris, al menos pudo hacerle una herida durante el combate, que posteriormente sería clave, antes de irse a celebrar Halloween. Efectivamente, el caballero quedó vendido frente al ataque de mi plasma una vez eliminó a mi agente. Así que lo ataqué con él sobrecalentado, pero sólo pude conseguir tres impactos, uno de los cuales esquivó Héctor, si no llega a ser por las heridas que ya tenía se hubiera salvado. El resto de mis agentes se centraron en avanzar a cubierto hacia el centro, tratando de evitar los disparos de los pocos grises que quedaban. En el tercer punto de inflexión tuve la suerte de conseguir la iniciativa, así que con un plasmazo de mi líder me cargué a otro de sus agentes, con lo que Héctor ya sólo contaba con uno, que cayó a continuación. Entre tanto iba recortando la diferencia que me sacaba Héctor en Puntos de Victoria, hay que recordar que este es el objetivo principal del juego. Así dimos por concluida la batalla, ya que con las activaciones que me quedaban estaba claro que me iba a hinchar a conseguir puntos. Buena partida, aunque posiblemente las cosas se me hubieran puesto más difíciles si Héctor hubiera activado con más cuidado a sus agentes.
MARTES:
Sigo con la pintura de los Marines Espaciales del Caos de Kill Team, aunque les queda bastante, la cosa promete.
MIÉRCOLES:
Estuve los ratos libres que tuve por la tarde pintando a los agentes del comando de Marines Espaciales del Caos de Kill Team. He llegado al punto en el que la precisión prima, con lo que la velocidad se resiente mucho; si logro terminar a 3 de éstos para la próxima semana me doy con un canto en los dientes.
JUEVES:
Gran quedada para jugar a Underworlds, parece que los esfuerzos de Borja por relanzar el juego están dando sus frutos, pues hoy éramos 5. La propuesta era jugar unas cuantas partidas al formato Rivals, para ir calentando motores de cara al torneo que está organizando el susodicho de cara a las Navidades. Pude jugar dos partidas, la primera contra Erik, que está empezando, y la segunda contra Jairo, todo un veterano, pese a que sólo he jugado con él un par de veces.
Erik también venía con otra banda de orkos, y aunque sólo son 3, seguramente es una de las bandas más pegonas que hay. Pese a estar empezando conoce las reglas bastante bien y salvo un par de correcciones, y alguna sugerencia amistosa que le hice, el juego fluyó con bastante facilidad. En el primer turno me pasé de precavido, pero es que la pegada de esos orkos malotes es brutal. De todas formas, visto el escaso éxito que tuve con las tiradas, creo que hice bien en no arriesgarme; en defensa negado, en ataque totalmente nefasto. Pese a todas las precauciones los guerreros de Erik se llevaron por delante a uno de los míos en el primer turno y a otro en el segundo. Afortunadamente Erik no conseguía demasiados puntos de victoria, aunque yo lo hacía aún peor; al final del segundo turno el marcador reflejaba un patético 4 a 2 a favor de mi rival. Sin embargo en el último turno me centré en puntuar las cartas de objetivos y alcancé los 7 puntos, mientras que Erik se quedó atascado en 6. El marcador no fue demasiado justo con los méritos de uno y otro. Debería haber ganado Erik, de hecho no lo hizo porque, pagando la novatada, en el último turno no presionó a mi líder, que estaba sobre un objetivo, lo que me permitió puntuar 2 cartas de objetivo en el final de fase y conseguir así 5 puntos. Seguro que no se le olvida la lección; la próxima vez lo hará mejor.
La segunda partida me enfrentó a Jairo y a sus Despojos de Gusano, una banda que he jugado un par de veces pero que no me llegó a convencer y, vista la partida de hoy, creo que la valoración que hice en su día fue la correcta; son difíciles de manejar, más delicados de lo que parecen, pegan poco... vamos: una joya. Eso sí; son unas miniaturas preciosas. Si en el primer turno de la anterior partida había sido muy conservador, en este no iba a ser menos. Lo gracioso es que Jairo también lo fue; el resultado fue una primera ronda patética. Sólo hubo un par de ataques, precisamente en la última activación de cada jugador. En esta partida la mano no me falló y gracias a unas tiradas más que decentes logré deshacerme de un par de seres purulentos en la segunda ronda, mientras que en la última me cepillé al guerrero que le quedaba a Jairo. Una paliza en toda regla, porque incluso tuve suerte a la hora de descartarme de objetivos en el primer final de ronda; a partir de entonces pude puntuar todas las cartas que me entraron. Espero que la racha siga así cuando celebremos el primer torneo Rivals de la asociación, lo que será en breve.
VIERNES:
Hoy nada de nada a nivel lúdico, salvo que continúa el pintado de miniaturas para Kill Team.
SÁBADO:
Más horas con las minis de Kill Team, la tarea es ardua, pero espero que mañana pueda acabar con los primeros 4 agentes.
DOMINGO:
¡Chin-pun! Acabé con los 4 primeros Marines Espaciales del Caos, ya sólo me quedan 6 para completar el comando de Kill Team... Estoy bastante satisfecho con el resultado, os dejo una foto para que juzguéis vosotros mismos.
Sigue cuidándote mucho. Un saludo.
Te han quedado bien los marines, quizá sea por la cámara fotos, pero parecen muy brillantes o azules, mas que de la Legión Negra, parecen de los Amos de la Noche.
ResponderEliminarSí, son los amos de la noche; han salido a mi, en mis tiempos mozos...
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