domingo, 20 de marzo de 2022

SEMANA 22.11

Enterrados en vida; calima.

Una mezcla de miedo y cariño en la última mirada que le dedica la niña. DEP, héroe.

El cadáver atado de pies y manos refrenda el martirio.


LUNES:

Un par de partidas de Marvel Champions intentado rodar al Capitán América. La cosa parece que pinta bien, creo que se acerca el momento de empezar la campaña de La Tiranía de Cráneo Rojo.


MARTES:

Partida de X-Wing contra Chispa, que me ganó por 147 a 123. No se me ocurre mejor momento que éste para gastar la mala suerte antes del torneo. En realidad, más que mala suerte por mi parte, el problema fue el exceso de suerte de mi rival; en no menos de 3 ocasiones libró 3 impactos, y no necesariamente los ataques eran a distancia 3. Como dicen en mi pueblo: tuvo más chorra que un caballo. No obstante, no quiero escudarme en el buen hacer de mi contrincante; cometí varios fallos, alguno de los cuales fue bastante grave. Así que en realidad esta partida ha sido una gran ocasión para acabar de afinar mi estrategia de cara al torneo y, de paso, ser un toque de atención para evitar dormirme en los laureles. Minuto y resultado:

Chispa me cedió la iniciativa, pues sorprendentemente iba a 196 puntos, no obstante todas las naves Colmillo de Javi tenían iniciativa 4, así que no se pisaban con las mías. Empecé colocando mi Lambda en la esquina derecha del tapete, la banda derecha había quedado más despejada de chatarra espacial, con lo que me resultaba más conveniente para mis naves grandes, mucho menos ágiles que los Colmillos de Chispa. Sorprendentemente, Javi colocó sus naves a intervalos regulares en su zona de despliegue, de modo que sólo uno estaba enfrentado a mi nave. Al lado de la Lambda coloqué al Diezmador y en el centro del tapete al TIE X-1, con la idea de distraer alguna nave de Javi. Como era de esperar, Chispa lanzó hacia delante a los Colmillos que estaban en la parte izquierda del tapete, mientras que los otros dos hicieron un giro cerrado hacia el centro. Mi Lambda hizo un 3 recto, igual que el Diezmador, la idea era alcanzar el centro del tapete cuanto antes, pues ya suponía que el enemigo no iría al asalto frontal. El X-1 hizo un ponderado 1 recto, con el fin de no revelar mis intenciones y, de paso, no condicionar mis maniobras posteriores. En el siguiente turno ya pude atacar con el Diezmador, que tras hacer un 3 abierto hacia el centro pudo fijar blanco al Colmillo más rezagado. Antes de eso, la Lambda había hecho un 1 abierto hacia el centro, lo que permitió coordinar al Diezmador. dándole un Refuerzo. Las naves de Chispa más a la izquierda continuaron su movimiento, pero las otras dos giraron hacia el centro. Mi X-1 giró hacia la derecha con un 2 cerrado; no es conveniente exponerlo hasta que las naves enemigas no estén bien maduras. En el ataque del Diezmador logré 3 impactos, gracias a la Fuerza y a la habilidad del piloto, pero nada; Javi libró los 3. En el siguiente turno empezaron los problemas derivados de la mala colocación inicial: no podía mover a la Lambda sin tensionarla, por lo que la coordinación estaba perdida este turno. Como mal menor, hice un 0 para no repetir el problema en el turno posterior. Al perder el Refuerzo del Diezmador las llevé de todos los colores, perdiendo los escudos a las primeras de cambio, pues sufrió el ataque de todas las naves de Javi. Creo que yo logré hacer un impacto en este turno. No estoy muy seguro. En el siguiente la Lambda pudo coordinar nuevamente, pero el Diezmador se puso Refuerzo trasero contando dejar atrás a los Colmillos, o al menos a los más cercanos. Pero mi plan se fue al garete porque Javi me bloqueó el uno recto con una nave que se plantó justo delante. Dentro de lo malo, destacar que al haber girado la torreta hacia los costados pude atizarle a un Colmillo que estaba a distancia 1, dejándolo para el arrastre. El X-1 también logró atacar, pero con nulos resultados gracias a la buena defensa de Javi. La Lambda también logró algún impacto gracias al Blanco Fijado que obtuvo por coordinar al Diezmador. Por otro lado, las naves de Javi atacaron a bloque al Diezmador, que, al tener el Refuerzo mal puesto no se pudo defender de nada: 4 ó 5 impactos más. La cosa se ponía seria... Pero se me puso de color hormiga para el siguiente turno, pues la Lambda se vio obligada a hacer una cosa rara para no ser pasto de las previsibles maniobras koi de un par de naves enemigas. El dos cerrado hacia mi zona de despliegue finalmente no fue tan mala idea, pero me llevé una doble tensión al caer, por un pelín, sobre un montón de chatarra. Además de los kois que pusieron a la cola de mi Lambda a un par de Colmillos, otro quedó justo detrás pero sin poder atacarla y el cuarto se puso en un lateral a distancia 1. Pese a todo no cobró demasiado; perdió todos los escudos y se llevó un crítico de propina. Podía haber sido peor... Por contra, mi Lambda cascó un buen ataque contra uno de los Colmillos, mientras que entre el Diezmador y el X-1, que se había puesto justo delante de la nave de apoyo, se llevaron por delante a otro. Las tornas de la partida giraron a mi favor. Sin embargo fue un espejismo, pues al no hacer un tonel con el X-1 mi movimiento con la Lambda, con dos tensiones, estaba muy condicionado, así que hice un 2 recto para quitarme una tensión. Luego me di cuenta de que estaba a punto de salirme en el siguiente turno, si es que realmente no me salía. No hubo tiempo para despejar las dudas, pues Javi le dio con todos los Colmillos consiguiendo los 5 impactos necesarios para eliminar a mi nave de apoyo. Una gran putada, o como se diga, especialmente por no poder atacar este turno. En fin... En el turno siguiente logré cargarme otro Colmillo, la cosa estaba equilibrada de nuevo, quizá ligeramente a mi favor. Pero a partir de aquí empezó mi calvario, pues Chispa, tras un pacto con el Diablo o algo peor, empezó a esquivarlo todo. Y cuando digo todo, quiero decir todo. Para colmo de males, el Diezmador estuvo fuera del "fregao" tres turnos, los necesarios para dar la vuelta a esta nave tan torpona. Cuando por fin estaba en condiciones de echar una mano al X-1, que ya estaba sin escudos y con un impacto, me descuidé y lo subí a un montón de chatarra, quedándome sin atacar por no poder girar la torreta. Entonces el X-1 recibió un ataque de Javi con dos éxitos y, como no podía ser de otra manera, no esquivé ninguno. Para casa. Ahora la partida estaba definitivamente perdida. No obstante, seguimos jugando y aunque el Diezmador logró hacer un impacto que me daba la mitad de una nave no pudo dañar a la otra para conseguir lo mismo. Una pena.

Buena partida, Chispa tiene una buena lista para el torneo. Lista que ya en nuestro anterior enfrentamiento me dio muchos quebraderos de cabeza. Si sigue teniendo la misma suerte el domingo, nos tendremos que conformar con pelear por el segundo puesto.


MIÉRCOLES:

Tras varias sesiones de tanteo con el Capitán América ha llegado la hora de estrenar La Tiranía de Cráneo Rojo, la primera gran expansión de Marvel Champions, que jugaré en formato de campaña. Es cierto que también permite jugar los escenarios sueltos, pero creo que así pierde toda la gracia.

En realidad, hoy me gustaría haber probado un par de cambios en mi lista de X-Wing, pero por una cosa u otra no encontré rival. Así que me voy a quedar con ganas de saber si los retoques serían convenientes o no. Una pena...

Comienzo la campaña contra Calavera y con más miedo que vergüenza, jugando en el modo Normal, nada de Experto, y tras una partida sospechosamente fácil me pregunto si habré hecho todo bien. Así que vuelvo a la carga, intentando fijarme aún más en todos los detalles para no cagarla, y el resultado es prácticamente el mismo. Conclusión; no creo que haya hecho nada mal, simplemente la campaña debe ir escalando de dificultad a medida que pasas escenarios. Como parece lógico, por otra parte.

Mañana la daré caña al Hombre Absorbente, ya que Calavera apenas me ha servido de precalentamiento. 


JUEVES:

Tras pensármelo un par de veces, he decidido empezar de nuevo la campaña de La Tiranía de Cráneo Rojo, pero esta vez en nivel experto. Creo que ha sido buena idea, porque el reto parece algo mayor y la narratividad mejora, aunque no aumenta la dificultad excesivamente. Esto es así porque la repercusión de una partida sobre la siguiente es mayor, por ejemplo; en este modo se inicia el nuevo escenario con la vida restante del superhéroe al acabar la partida anterior, se pueden añadir al mazo de encuentros una Complicación por escenario para volver la vida al máximo, antes de empezar una nueva partida... En cualquier caso, Calavera no pasa de ser un sparring mediocre y el Hombre Absorbente no para de chupar golpes. Total, que dos escenarios, dos éxitos. Ya he preparado el mazo para el tercer escenario, en el que me enfrentaré al malvado Supervisor, AKA Taskmaker. Pero eso será mañana.

En otro orden de cosas; el blog ha alcanzado las 3.000 visitas. La cifra se puede interpretar de varias maneras; desde un punto de vista cuantitativo una cifra ridícula, pero siendo realista sorprende que algo creado de la nada pueda ser, en primer lugar, localizado y, luego, leído tantas veces. En cualquier caso, mi objetivo para con este blog, que es mantenerme activo mentalmente, está más que cumplido. Vamos a por más.

 

VIERNES:

Ultima partida de entrenamiento antes del torneo de X-Wing. La idea era probar cómo funcionaba Gonk de tripulante del Diezmador. Ya sabía que por sí sólo es bastante malo, pero quizá al meterlo en una nave que iba a ser coordinada y además tiene una acción de Refuerzo gratuita, podía ser interesante. El resultado fue bastante malo, de hecho no lo utilicé ni una sóla vez. Es cierto que el desarrollo de la partida hizo que no pudiera usar la coordinación de la Lambda, pues muy hábilmente me la ionizó Viti o se chocaba y perdía acción. En cualquier caso me pareció que esa situación se podía dar fácilmente en las partidas, especialmente en las de torneo donde la gente va a por todas. Así que descartado el manitas es hora de buscar algo que mejore la lista. La partida no tuvo demasiada historia -además la escribo con un par de días de retraso y la tengo casi olvidada-, Viti venía con su lista Scum especializada en ionizar al personal, y a fe que lo hizo. En cualquier caso, su lista adolece de falta de pegada y únicamente parece interesante si logras ionizar a una nave en las proximidades del borde del tapete y así echarla fuera. No fue el caso y logré imponerme con bastante facilidad. 

Tras descartar a Gonk me planteé qué podía hacer para mejorar mi lista, se me ocurrieron bastantes cosas, pero casi todas eran inviables o bien me llevaban a los 200 puntos. Después de darle muchas vueltas al coco me pareció buena idea cambiar el escudo extra por un casco; es cierto que te puedes comer un crítico, pero la idea es poder usar a la Ministra Tua cuanto antes. Así las cosas la lista queda en 197 puntos, me parece que debería meter algo más, pero no sé qué...


SÁBADO:

Hoy poco a nivel lúdico, pues me pasé la mañana clasificando ropa y cargando palés de garbanzos para el convoy que mañana sale de León hacia Ucrania. Llegué a casa hecho polvo. Hasta la noche no fui persona. Por cierto, se pasó mi madre a cenar y estrenamos el Red7, Me pareció de lo más interesante, aunque no ha cuajado entre el público femenino, que sigue prefiriendo el Virus. No importa, lo importante es pasarlo bien, el juego es lo de menos.


DOMINGO:

Antes de ir a jugar se me iluminó el candil y, con las listas ya impresas y todo, metí la carta de Puntería para, si me dejaba la dirección del torneo, añadírselo al Diezmador. Chispa no me puso ninguna pega, así que esa fue mi lista definitiva para el último torneo de X-Wing 2.0:


Este torneo supuso una despedida bastante amarga, pues no tuve la suerte necesaria en la primera partida y jugué bastante peor de lo que debía, cometiendo un error imperdonable, en la segunda. En la tercera partida logré el triunfo de la honrrilla, eso sí, frente a un Viti tan deprimido y abatido como yo... Un desastre. Minuto y resultado:

En la primera partida me enfrenté a Pedro, un asturiano con el que ya había tenido el placer de perder hace un par de años. Venía con una lista muy similar a la de aquella vez, pero ahora la novedad era una LAAT, a la que acompañaban un par de ARC, un Torrente y un Ala V. Enseguida empezaron los ataques y en el turno dos ya estaba mi Diezmador sin escudos, uno de los ARC también se llevó lo suyo. En el siguiente se vería aún más claro que el objetivo de Pedro era mi Diezmador, que se las llevó de todos los colores y empezaba a entrar en zona roja, debido a un bloqueo en mi Lambda que le impidió coordinar para reforzarlo. En cualquier caso su nave señera se convirtió en mi nuevo objetivo, ya que las ARC habían pasado de largo y ya "sólo" disparaban por detrás. Al final del turno la LAAT estaba realmente mal, a falta de 1 impacto para cascar. En el siguiente turno se decidió la partida, pues sorprendentemente la LAAT no cayó frente a los ataques del Diezmador y del X-1 y aunque lo hizo por el ataque de la Lambda ya era demasiado tarde, pues para colmo de males atacó por detrás al Diezmador haciéndole 4 impactos por una mala combinación de los críticos. Estos 4 impactos, junto con los ataques del resto de naves enemigas se llevaron por delante mi nave insignia. Adiós a la partida. En cualquier caso seguimos dándole y la cosa parecía que mejoraba algo para mi, aunque siendo realista necesitaba un milagro para poder ganar sin el Diezmador. Pronto cayó la Lambda, pero también me cargué al Torrente y a un ARC, ya sólo quedaba un hermano, eso sí entero, y el Ala V, que estaba sin escudos. Mi X-1 estaba casi intacto. Debido a mi mejor iniciativa de piloto logré hacer un buen ataque al Ala V, pero no era mi día y Pedro esquivó lo suficiente como para no perderlo, por el contrario yo me llevé algún impacto, con lo que ya había perdido la mitad de la nave. Ahora mismo iba perdiendo la partida, necesitaba cargarme al Ala V, cosa factible, y dañar a la mitad al ARC, cosa muy difícil. Al final, ni una cosa ni otra; mi nave cayó y perdí 143 a 200. 

La segunda partida fue mucho peor para mi, porque un error absurdo me hizo perder a mi Lambda en el tercer turno, sin que llegara a disparar en toda la partida y sin que le diera tiempo a hacer ninguna coordinación. No quiero andar con paños calientes; un vergonzoso desastre. Mi rival fue Juan Carlos, uno de Ponferrada que de vez en cuando se deja caer por León. Venía con una lista de un par de Alas E y la Sheathipede. Hacía tiempo que no me enfrentaba a naves con torpedos de protones y al ver cómo le entraban casi todos los impactos a mi Lambda me asusté un poco y, en vez de ir hacia el Ala E de iniciativa 2 que tenía a mi izquierda, me fui a la derecha para subirme a un asteroide. Total, que me quedé a distancia de acción del torpedo y sin poder darme refuerzo por la coordinación con el Diezmador. En resumen, que cayó sin disparar un solo tiro. La verdad es que fue lamentable y bochornoso. Lo peor de todo fue que el Ala E bueno había quedado a un impacto de cascar tras un buen ataque combinado de mis dos naves restantes; ese ataque de la Lamdba hubiera sido crucial, máxime porque los Alas E llevaban R2, con lo que pudo reparar un par de escudos antes de volver a dar cera. Para más inri, mi X-1 quedó en un fuego cruzado entre los dos Alas E, que lo dejaron a un impacto de cascar, con tan mala suerte que estaba en el arco central de Corran y, a iniciativa 0, le mandó al otro barrio. ¡Qué putada! Así que mi Diezmador estaba solo frente al peligro, el hombre hizo lo que pudo y se cargó al Sheathepede y luego a Corran, al final sólo quedaba el Ala E de iniciativa 2 y él. Lógicamente mi nave se iba cargando de daño, pero no demasiado porque Juan Carlos no acababa enfocar a mi nave, pero en el último turno, cuando ambas naves estaban a falta de 2 para cascar le aticé con blanco fijado y concentración y sólo le hice 1 impacto, eso sí a distancia 3, en cambio el sí me hizo los dos impactos que me faltaban. Esta derrota fue más que merecida; es difícil hacerlo peor. Resultado final 200 a 160, aproximadamente. Bueno, andando y aprendiendo.

La tercera partida nos enfrentó, en la mesa de los "losers", a Viti y a mi. Ambos estábamos bastante desanimados y acordamos acabar la partida a las 2:15, con lo que sólo jugamos 50 minutos. Al final gané yo, no recuerdo cuánto le hice, pero él a mi sólo 49 puntos.

Con todo y con eso quedé 6º de 10, cosa sorprendente, pues pensé que iba a quedar 9º. Bueno, ahora ya toca pensar en el X-Wing 2.5, espero que me de tan buenos momentos como las anteriores versiones.

Me gustaría agradecer el esfuerzo de Chispa por montar y organizar todo el tinglado del torneo y además el gran detalle que no jugar para evitar que fuéramos impares. Gracias.


Sigue cuidándote mucho. Un saludo.

2 comentarios:

  1. Haber cual es tu próxima lista, yo dejare en garaje los Colmillos y volveré a Rebelde un rato.

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  2. Te la paso por wass ahora mismo.

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SEMANA 22.25 El verdadero éxito sólo se logra tras superar el fracaso. Lástima que ninguna de las muchas decepciones que he acumulado me hay...